Libertad Religiosa - Noticias de 2008

Arzobispo de Karachi: “Ser cristiano en Pakistán es muy difícil”

el . Publicado en Noticias de 2008

Inicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivadoInicio desactivado
 

Mezquita en una ciudad europea"Queremos contar al Papa las dificultades de ser cristiano en Pakistán, de la presión a la que estamos sometidos y de la necesidad de cultivar una fe firme y de educar a nuestro pueblo".

Así habló monseñor Lawrence John Saldanha, arzobispo de Lahore y presidente de la Conferencia Episcopal de Pakistán, en una entrevista concedida a L'Osservatore Romano el 18 de junio. Los obispos de este país asiático se encuentran en estos momentos en Roma para la visita "ad limina".

El prelado, obispo de la diócesis más antigua de Pakistán (creada en 1886), explicó al diario vaticano que la situación de la comunidad cristiana es particularmente difícil en el Norte, donde los cristianos han sido víctimas de la violencia integrista. "Hace dos años se les dijo que si no querían hacerse musulmanes debían abandonar la región. Los que se han quedado sufren ataques", explicó.

La mayor parte de los cristianos vive en el centro y en el sur del país. "Las relaciones son buenas. Convivimos con ellos, aunque somos víctimas de discriminaciones en lo que respecta al trabajo y a las clases sociales. Los cristianos pertenecen mayoritariamente a las castas inferiores, y por ello desean abandonar el país".

A esto se une la difícil situación económica, por el encarecimiento de los productos básicos: "todo es costoso, el arroz, la gasolina, el gas. Las personas no tienen suficiente para vivir y educar a sus hijos. Nosotros no podemos desarrollar nuestro apostolado, también por la falta de dinero".

"Podemos evangelizar, pero no directamente, sólo indirectamente. El clima de intolerancia ha llegado a tal punto que las personas no quieren hacerse cristianas, a no ser que estén seguras de que van a poder salir del país".

"La Iglesia [Católica] en Pakistán está sometida a una enorme presión, pero conservamos la fe y la esperanza, también viendo que las personas, sobre todo los jóvenes, frecuentan nuestras iglesias", añadió monseñor Saldanha.

En Pakistán, donde los católicos suponen menos del 1%, hay en estos momentos 270 sacerdotes en siete diócesis, además de 735 religiosas y 169 religiosos. Es difícil que entren misioneros extranjeros porque el Gobierno pone muchas dificultades para conceder visados. "Para que un misionero pueda entrar es preciso que otro que esté allí vuelva a casa. Podemos sustituir solo al que muere o se marcha del país. La presencia de misioneros extranjeros debería ser estable, pero su número en cambio está disminuyendo".